Comencemos por la primera jugada, y en particular, con esta pregunta: ¿están mejor las
blancas en el ajedrez? A primera vista, esto es bastante tonto; después de todo las blancas
mantuvieron un porcentaje ganador de 56%-44% durante la mayor parte del siglo. Pero también es verdad que algunos jugadores de clase mundial han obtenido resultados brillante con
las negras. Se dice que Fischer ha comentado que su despegue ajedrecístico se produjo cuando
se dió cuenta de las genuinas posibilidades ganadoras de las negras.
Con esto en mente entramos a la discusión del tiempo, y cuál es el valor de un tiempo en la
apertura. En su maravilloso libro Dynamic Chess Strategy (La estrategia dinámica en ajedrez),
Suba explica: "El ajedrez es un juego de información completa, y la información de las
negras es siempre mayor -¡por una jugada!" Por supuesto, aún el mismo Suba tiene mejores
resultados con blancas que con negras, pero este punto de vista teórico informativo, realmente es bastante importante en el ajedrez, y explica algunas de sus paradojas.
Tradicionalmente, la teoría clásica del ajedrez ha ignorado las cualidades negativas de tener
que hacer una jugadada. La teoría moderna reconoce este hecho de varias formas.
Esencialmente, la jugada extra permite al defensor anticiparse a los planes del rival.
Este es el punto principal de Suba; el ajedrez es un juego de reacción, en el cual, todas las jugadas están encadenadas, y de ese modo en algún sentido ayudan al rival. Por supuesto, uno también tiene el riesgo de llevar las cosas demasiado lejos. No toda la información es útil; por ejemplo, a usted no le ayudará comprobar que le están dando mate en forma inevitable; y aun el conocimiento de que su rival está tratando de forzar debilidades en su posición, puede no ser suficiente para evitar que eso suceda. Fundamentalmente este es el problema de la
versión extrema del argumento de Suba (la parte de 'las negras están mejor'). Algunas posiciones ajedrecísticas son más lineales, y en ellas un tiempo extra sencillamente nos
ubica cerca de la línea de llegada, mientras,otras están caracterizadas por sus luchas interdependientes cuerpo a cuerpo, en las cuales el conocimiento de la última jugada del rival casi no tiene valor. Tomando esto en cuenta, podríamos sugerir (como hace Suba) que las negras juegan con gran potencial de reacción en las estructuras desequilibradas. Ahora que estamos más o menos en tema, ¿cuál es el resultado más probable de una partida de ajedrez jugada en forma perfecta? Como probablemente ya sabe, es tablas. Por supuesto, no puedo probarlo, pero dudo que encuentre un solo jugador fuerte que esté en desacuerdo. Para aquellos que gustan de las fuentes autorizadas, recuerdo a Kasparov, tras un empate en la última ronda, explicando a los periodistas: ´bueno, el ajedrez es empate'. Si uno de los jugadores más dinámicos de la historia (con el mayor porcentaje ganador de su tiempo) cree esto, prácticamente podemos asumir que es cierto. Y más aún ¡cuantas fuentes simplemente se niegan a referirse a este tema!
Uno siente que ellos no quieren presentar al ajedrez como un juego aburrido, que es competitivo solamente por los errores humanos. Pero entre otras cosas, incluso el juego ´perfecto´puede dar como resultado partidas que, no obstante estan bien jugadas, se caracterizan por cambios dinámicos salvajes. Además, una enorme cantidad de posiciones evaluadas como 'igualdad' en los libros, son tan desequilibradas y complejas, que esa evaluación es solamente una guía para nuestras chances prácticas. Tahl destacó una vez que la mayoría de las evaluaciones ´=´ en los libros de apertura ¡son realmente de pequeña ventaja negra! Como autor de libros de aperturas, sé lo que quiere decir. Debido a la presunción de que las blancas están mejor, el momento de la partida en que las negras se liberan o neutralizan los planes de las blancas, ha sido considerado automáticamente como otorgándoles la igualdad, aunque en aperturas dinámicas la finalización de la iniciativa de las blancas muy frecuentemente significa que las negras se han apoderado de ella con ventaja.
Esto plantea la noción de 'aritmeticismo' en ajedrez. Especialmente tras la aparición de las computadoras de ajedrez hay jugadores que tienden a pensar en térmicos de ventajas aritméticas, por ejemplo, 'las blancas están mejor por 0,33 peones'. Esto tiene su utilidad, pero puede conducir a una visión bastante artificial de la partida. ¿Qué pasa cuando ambos bandos hacen unas pocas jugadas, que son las mejores, y de repente los 0,33 peones bajan a 0,00? El defensor desde este punto de vista dirá: 'Bueno, no vi lo suficientemente lejos. Si lo hubiera hecho habría evaluado adecuadamente la posición original como 0,00'. El único problema con este enfoque es que el ajedrez es un empate. Y todas las clases de ventajas claras son insuficiente para forzar la victoria contra una defensa perfecta. Finalmente, tenemos el mismo problema cuando afirmamos, por ejemplo, que 1.Cf3 es mejor que 1.e4 ó 1.d4 es mejor que 1.c4. Esas son evaluaciones sin contenido, a menos que las coloquemos en el contexto de 'mejor contra el rival x' o 'mejor desde el punto de vista de alcanzar buenos resultados con el menor estudio' o algo así. En cuanto al objetivo de reclamar la superioridad, ¿cuál sería nuestro criterio? Sugeriría que solamente si una primera jugada tiene constantemente mejores resultados que otras contra todos los niveles de oposición, podría ser designada como 'la mejor' en un sentido práctico. Ya que todas las primeras jugadas razonables conducen a tablas con juego perfecto, no se puede justificar el reclamo de superioridad teórica fundamental para ninguna de ellas.
blancas en el ajedrez? A primera vista, esto es bastante tonto; después de todo las blancas
mantuvieron un porcentaje ganador de 56%-44% durante la mayor parte del siglo. Pero también es verdad que algunos jugadores de clase mundial han obtenido resultados brillante con
las negras. Se dice que Fischer ha comentado que su despegue ajedrecístico se produjo cuando
se dió cuenta de las genuinas posibilidades ganadoras de las negras.
Con esto en mente entramos a la discusión del tiempo, y cuál es el valor de un tiempo en la
apertura. En su maravilloso libro Dynamic Chess Strategy (La estrategia dinámica en ajedrez),
Suba explica: "El ajedrez es un juego de información completa, y la información de las
negras es siempre mayor -¡por una jugada!" Por supuesto, aún el mismo Suba tiene mejores
resultados con blancas que con negras, pero este punto de vista teórico informativo, realmente es bastante importante en el ajedrez, y explica algunas de sus paradojas.
Tradicionalmente, la teoría clásica del ajedrez ha ignorado las cualidades negativas de tener
que hacer una jugadada. La teoría moderna reconoce este hecho de varias formas.
Esencialmente, la jugada extra permite al defensor anticiparse a los planes del rival.
Este es el punto principal de Suba; el ajedrez es un juego de reacción, en el cual, todas las jugadas están encadenadas, y de ese modo en algún sentido ayudan al rival. Por supuesto, uno también tiene el riesgo de llevar las cosas demasiado lejos. No toda la información es útil; por ejemplo, a usted no le ayudará comprobar que le están dando mate en forma inevitable; y aun el conocimiento de que su rival está tratando de forzar debilidades en su posición, puede no ser suficiente para evitar que eso suceda. Fundamentalmente este es el problema de la
versión extrema del argumento de Suba (la parte de 'las negras están mejor'). Algunas posiciones ajedrecísticas son más lineales, y en ellas un tiempo extra sencillamente nos
ubica cerca de la línea de llegada, mientras,otras están caracterizadas por sus luchas interdependientes cuerpo a cuerpo, en las cuales el conocimiento de la última jugada del rival casi no tiene valor. Tomando esto en cuenta, podríamos sugerir (como hace Suba) que las negras juegan con gran potencial de reacción en las estructuras desequilibradas. Ahora que estamos más o menos en tema, ¿cuál es el resultado más probable de una partida de ajedrez jugada en forma perfecta? Como probablemente ya sabe, es tablas. Por supuesto, no puedo probarlo, pero dudo que encuentre un solo jugador fuerte que esté en desacuerdo. Para aquellos que gustan de las fuentes autorizadas, recuerdo a Kasparov, tras un empate en la última ronda, explicando a los periodistas: ´bueno, el ajedrez es empate'. Si uno de los jugadores más dinámicos de la historia (con el mayor porcentaje ganador de su tiempo) cree esto, prácticamente podemos asumir que es cierto. Y más aún ¡cuantas fuentes simplemente se niegan a referirse a este tema!
Uno siente que ellos no quieren presentar al ajedrez como un juego aburrido, que es competitivo solamente por los errores humanos. Pero entre otras cosas, incluso el juego ´perfecto´puede dar como resultado partidas que, no obstante estan bien jugadas, se caracterizan por cambios dinámicos salvajes. Además, una enorme cantidad de posiciones evaluadas como 'igualdad' en los libros, son tan desequilibradas y complejas, que esa evaluación es solamente una guía para nuestras chances prácticas. Tahl destacó una vez que la mayoría de las evaluaciones ´=´ en los libros de apertura ¡son realmente de pequeña ventaja negra! Como autor de libros de aperturas, sé lo que quiere decir. Debido a la presunción de que las blancas están mejor, el momento de la partida en que las negras se liberan o neutralizan los planes de las blancas, ha sido considerado automáticamente como otorgándoles la igualdad, aunque en aperturas dinámicas la finalización de la iniciativa de las blancas muy frecuentemente significa que las negras se han apoderado de ella con ventaja.
Esto plantea la noción de 'aritmeticismo' en ajedrez. Especialmente tras la aparición de las computadoras de ajedrez hay jugadores que tienden a pensar en térmicos de ventajas aritméticas, por ejemplo, 'las blancas están mejor por 0,33 peones'. Esto tiene su utilidad, pero puede conducir a una visión bastante artificial de la partida. ¿Qué pasa cuando ambos bandos hacen unas pocas jugadas, que son las mejores, y de repente los 0,33 peones bajan a 0,00? El defensor desde este punto de vista dirá: 'Bueno, no vi lo suficientemente lejos. Si lo hubiera hecho habría evaluado adecuadamente la posición original como 0,00'. El único problema con este enfoque es que el ajedrez es un empate. Y todas las clases de ventajas claras son insuficiente para forzar la victoria contra una defensa perfecta. Finalmente, tenemos el mismo problema cuando afirmamos, por ejemplo, que 1.Cf3 es mejor que 1.e4 ó 1.d4 es mejor que 1.c4. Esas son evaluaciones sin contenido, a menos que las coloquemos en el contexto de 'mejor contra el rival x' o 'mejor desde el punto de vista de alcanzar buenos resultados con el menor estudio' o algo así. En cuanto al objetivo de reclamar la superioridad, ¿cuál sería nuestro criterio? Sugeriría que solamente si una primera jugada tiene constantemente mejores resultados que otras contra todos los niveles de oposición, podría ser designada como 'la mejor' en un sentido práctico. Ya que todas las primeras jugadas razonables conducen a tablas con juego perfecto, no se puede justificar el reclamo de superioridad teórica fundamental para ninguna de ellas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario